LA FIESTA DE LOS PATIOS DE CORDOBA (Patrimonio de la Humanidad)
El Ayuntamiento de Córdoba organiza en la primera quincena de mayo un concurso de Patios, donde los propietarios engalanan sus viviendas para conseguir un prestigioso galardón dado por el Consistorio. Paralelamente se celebraba un festival con actuaciones folclóricas, donde se dan cita prestigiosos cantaores y bailaores de la tierra, todo esto acompañado de un buen vino de la tierra con tapas típicas de la zona.
Los Patios surgen debido al clima caluroso y seco de Córdoba, ya desde los romanos y más tarde los musulmanes, adaptaron el tipo de casa popular a las necesidades que tenían, centraron la vivienda en torno a un patio, que normalmente tenía una fuente o un pozo en el medio, que recogía el agua de lluvia. Los musulmanes asumieron este tipo de casa, con una entrada desde la calle, el zaguán, el cual llenaban de abundante vegetación para dar frescor a los que por allí pasaban.
Hay dos tipos de patios, uno de ellos es el de las casas unifamiliares, donde todas las estancias se distribuyen alrededor de ese patio, el suelo suele estar empedrado o enlosado con mosaicos de distintas formas. El otro son las casas de vecinos, que antiguamente abundaban más, ahora van desapareciendo poco a poco. Solían tener dos plantas, la primera con el patio en el medio y un pozo en el centro, con algunos lavaderos en los laterales, para uso de los vecinos y la planta de arriba estaba decorada con macetas en los balcones corridos con sus escaleras.
Actualmente, la Fiesta de los Patios Cordobeses, es un concurso que se celebra todos los años en el mes de mayo. Los patios que participan, se abren de manera gratuita para que puedan ser visitados dentro de un horario establecido.
Aunque su origen se remonta a 1921, no empezó a popularizarse hasta 1933, y es a partir de 1947 cuando el concurso se consolida y Córdoba se convierte durante estos días en centro de atención con gran cantidad de turistas que llegan a visitarlo. Ya en 1980 fue declarado "Fiesta de Interés Turístico Nacional", pero es en el 2012 cuando son declarados "Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad" por la Unesco cuando comienzan a recibir una oleada de turistas cada año.
Los Patios están distribuidos por distintos barrios de Córdoba, los más característicos son los del barrio del Alcázar Viejo, que se encuentra entre el Alcázar y la parroquia de San Basilio; los del barrio de Santa Marina, cerca de San Lorenzo y la Magdalena. También entorno a la Mezquita-Catedral se encuentra el barrio de la judería, donde hay patios muy antiguos y de gran belleza. Y por último tenemos los doce Patios del Palacio de Viena, éstos están abiertos todo el año, ya que no son de particulares como los de "La Fiesta de los Patios".
Con el fin de conservar la arquitectura típica y para incentivar el festival, se admiten a concurso patios de reciente construcción, estableciéndose dos categorías: los patios de arquitectura antigua y los de arquitectura moderna, como el que podemos ver en la foto.
Cada año elegir el mejor patio es más difícil, pues cada vez son más los patios que participan en el certamen, actualmente rondan unos 50 patios. Este festival se complementa con un programa educativo organizado por el Ayuntamiento de Córdoba, para dar a conocer a los estudiantes la arquitectura y el patrimonio de Córdoba.
Mi recomendación es que antes de ir llaméis a la Oficina de Turismo de Córdoba y os diga como funciona ese año la Fiesta, ya que cada año se organiza de manera diferente. Hace dos años había que reservar a través de la Oficina de Turismo de Córdoba, era gratuito pero tenías que hacer reserva previa para poder visitarlos, esto lo hacían por la masificación que se produce para ver los patios y así evitar largas colas de espera. Pero el año pasado la visita era libre y gratuita, ya no necesitabas pases especiales ni reservas de ningún tipo.
Una última recomendación es deciros que ya que vais a visitar esos maravillosos patios, aprovechéis la visita para conocer Córdoba, ciudad con un gran legado cultural y monumental y de gran valor histórico, cercana al río Guadalquivir. Muchos pueblos como los romanos o los musulmanes, dejaron una huella imborrable a través de sus edificaciones arquitectónicas y monumentos que hoy día se conservan en muy buen estado. Un ejemplo de ello es la Mezquita-catedral, uno de los mayores atractivos de Córdoba.
Se comenzó a construir como mezquita en el año 785, con la reutilización de los restos materiales de una basílica hispanorromana. Más tarde con la Reconquista cristiana de la ciudad, se llevó a cabo su consagración como catedral de la diócesis de Córdoba y se prohibió cualquier culto colectivo o rezo organizado no católico. Y en 1523 se construyó su basílica cruciforme renacentista de estilo plateresco. Hoy día todo el conjunto constituye el monumento más importante de Córdoba.
La Unesco, reconoció en 1994 la importancia universal de los bienes históricos cordobeses, ampliando el título de Patrimonio de la Humanidad no solo a la Mezquita-Catedral, sino también a todo el conjunto urbano que la rodea.
