viernes, 24 de marzo de 2017

PASTEL DE TORTILLA

     Hoy me he levantado con hambre, y como además tengo el día libre... me pondré a cocinar algo rico, pero no apto para dietas...
Esta receta me la enseñó a hacer -vía telefónica- mi prima Sagrario, con la que de vez en cuando intercambio alguna receta.
Es una receta muy sencilla, y como una imagen vale más que mil palabras... ahí va


Necesitamos un recipiente alargado, como el que usamos para hacer los bollos caseros (aunque en la foto veis un papel de cocinar cubriendo el cristal, no hace falta). Cubrimos el recipiente de bacon, se pone una tira hacia un lado, y otra hacia el otro y se juntan en el medio, y que cuelguen por los lados como se ve en la foto, esto es para luego poder cerrarlo.

Hacer las patatas en la sartén como para hacer tortilla de patatas, y echar cebolla si se quiere, una vez fritas, añadir el huevo como si se fuera a hacer una tortilla.
Por otro lado freímos unos pimientos
A continuación se echa sobre el bacon la mitad de la preparación de la tortilla, acto seguido añadir los pimientos o el ingrediente elegido, podría ser lonchas de queso...y después se echa el resto de preparado para la tortilla.
Acto seguido se cierra con las lochas del bacon y meterlo al horno durante 30 minutos a 180 grados.


Lo que asoma hacia la mitad del pastel son los pimientos fritos, donde también podéis meter queso u otro ingrediente.
Se puede acompañar de ensalada para hacerlo más ligero.



                                                              ¡Que os aproveche!!






viernes, 17 de marzo de 2017

SUIZA

Hoy me ha llamado una amiga para decirme que este verano se iba a Suiza, y he recordado mi viaje, uno de los más bonitos y gratificantes que realicé.
Me llamó para preguntarme cosas prácticas sobre el viaje, pues lo harían ellos por su cuenta y quería algunos consejos. Intentaré poner las cosas útiles que recuerdo...
Suiza tiene el tamaño de Extremadura, lo comento para que valoréis si cogéis un coche de alquiler. Se pueden recorrer las ciudades más importantes del país sin hacer muchos kilómetros. Los paisajes son espectaculares y los pueblecitos encantadores. Ahí va mi primer consejo, alojarse en el centro de Suiza es fundamental, pues así podéis conocerla con mayor facilidad y nunca os tendréis que recorrer el país de punta a punta. Siempre tendréis el centro como partida.

Otra cosa que os comento, y creo que es de utilidad por si lleváis coche propio, es que en Suiza no hay peajes, simplemente se compra la "Swiss Highway Vignette", que es una pegatina que podéis cencontrar en las gasolineras o en la frontera, costaba 30 € y la ponéis en el cristal del coche, es similar a la de la ITV y te sirve para toda tu estancia, ya que tiene la validez de un año.
Podéis ir a las oficinas de turismo y os darán gratuitamente un cartón redondo, que es una especie de reloj, que os servirá para aparcar el coche en las ciudades que visitéis durante un periodo determinado, normalmente una hora. Hay zonas de color blanco, verde y azul, para usar el cartón es la zona azul. Todas las ciudades tienen estas zonas en el centro, nosotros no tuvimos problemas y te sale gratis. Los parkings son carísimos. El primer día antes de buscar la oficina de turismo, en Ginebra, lo metimos en un parking del centro y el señor de la oficina de turismo nos dijo que lo sacáramos inmediatamente que ese Parking tenía un precio  prohibitivo... Y nos dio el cartoncito del reloj.
Los carteles de las autopistas son verdes y los de las carreteras nacionales azul, al contrario que en España. Esto te puede llevar a confusión en un principio, luego te acostumbras.
En cuanto a la moneda, el franco suizo es la moneda oficial y aunque Suiza no pertenece a la UE admite el pago en €, eso sí te devuelven el cambio en francos suizos...


Nuestra casita en Grindelwald

Bueno, ahora toca buscar un sitio donde alojarse, dependiendo del país que se visite, será mejor un hotel, un apartamento, etc.
En este caso, Suiza me invitaba a naturaleza, así que nosotros nos alquilamos una casita en un pueblecito muy bonito y coqueto, llamado Grindelwald, situado en el cantón de Berna, al lado de Interlaken.
Desde sus ventanas se veían unas montañas espectaculares, todas nevadas, el Jungfrau, que es el pico más alto, el Mönch y el Eiger. Este último era impresionante, por su proximidad.



Grindelwald






Las vistas eran espectaculares, ni en las películas con oscar a la mejor imagen encontraríamos un panorama igual.
Por las mañanas estábamos deseando levantarnos para ir a desayunar a la terraza y ver esa cantidad de nubes moverse con tanta rapidez.
Grindelwald es una estación reputada tanto en invierno como en verano, situada en a región de Jungfrau en los alpes berneses y está a una altura de 1034 m.



Puente Medieval de Lucerna

Suiza es famosa por muchísimas cosas como el chocolate, el queso, sus relojes, sus montañas y sus lagos... bueno estaría añadiendo cosas continuamente, solo añadiré una más... sus "bancos"
Suiza está formado por cantones, que constituyen el ente político y administrativo sobre el que se construye el estado. Actualmente hay 26 cantones.
En cuanto al idioma oficial son cuatro, el francés, el alemán, el italiano y el romanche. Dependiendo de los cantones, se habla uno u otro idioma.
Suiza tiene por un lado las ciudades, que tienen un encanto especial, si he de destacar alguna, destacaría Lucerna, es una ciudad medieval situada a orillas del lago Cuatro Cantones, con los Alpes de fondo y cuenta con uno de los puentes de madera más antiguos de Europa y el segundo más largo, conecta la ciudad antigua con la nueva.
Berna es la capital y también es muy bonita, por algo es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, tiene mucho encanto.
Zúrich está considerada la ciudad con mayor calidad del vida del mundo, es el motor financiero (allí se encuentra la banca internacional) y centro cultural del país.
Lausana está situada a orillas del Lago Leman, lugar de residencia de algunos reyes españoles, como Victoria Eugenia de Battenberg.
Muy cerca de Lausana se encentra Vevey, un lugar precioso a orillas del lago Leman, tiene un paseo precioso, donde encontramos una escultura de Charles Chaplin, vivió allí durante sus últimos 25 años, un lugar lleno de historia. Allí también escribió Rousseau su libro "El Contrato Social".

Palacio de las Naciones (Sede de la ONU en Ginebra)




Ginebra, es la ciudad más cercana a la frontera con Francia. Es el centro financiero y mundial de la diplomacia, allí hay numerosas organizaciones internacionales, una de las más importantes es la Sede de Naciones Unidas.
Como dato curioso en 2009 se ubicó como la cuarta ciudad más cara del mundo, detrás de Tokio, Osaka y Moscú, venciendo a Hong Kong, que se situó en quinto lugar.







Castillo de Chillon (Montreux)
La Ciudad de Montreux, es muy bonita, está situada a orillas del Lago Leman, a los pies de los Alpes suizos.
El Castillo de Chillon es el castillo más visitado por los turistas, está construido sobre una roca ovalada de piedra caliza que se adentra en el lago Leman. Este Castillo inspiró al poeta inglés Lord Byron en sus escritos.
Otra peculiaridad de Montreux es que fue la ciudad donde Freddie Mercury pasó los últimos años de su vida y donde compuso gran parte de sus canciones. Tiene un monumento en la Avenida principal.
Otra ciudad situada en el camino entre Berna y Lausana es Friburgo, ciudad bilingüe, hablan francés y alemán , está dividida en dos partes, la parte baja es la parte medieval y está amurallada.
Cerca de Friburgo, está Gruyères, una pequeña aldea medieval fortificada y famosa por la fabricación del queso Gruyere, se puede visitar la fábrica de quesos, te explican todo el proceso de fabricación y seguido hay una degustación. Un consejo,  en Gruyere os podéis tomar una raclette de quesos, está deliciosa.
No era mi idea daros información alguna sobre las ciudades, ni describiros todo lo que hoy día podéis buscar por internet, pero es inevitable hacer algún comentario. De todas formas cuando os planifiquéis vuestro viaje, lo primero que tenéis que hacer es buscar la máxima información posible.

En Suiza se encuentra el Jungfrau, el pico más alto (4.458), forma parte del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. El "Top of Europe" (la cumbre de Europa) que es la subida al Jungfraujoch, es la estación de tren de mayor altitud de Europa (3.454), es la guinda a cualquier viaje a Suiza, se puede subir con un tren especial llamado tren cremallera, aquí veis por qué...

El tren se puede coger en Grindelwald, donde lo cogimos nosotros, y para subir se detiene el tren dos veces, en 2 horas 10 minutos que dura el trayecto, entre otras cosas para que los pasajeros se vayan habituando a la altura.
He de contaros, que la subida es poco económica, os digo que nosotros éramos 4 personas y nos salía 600 euros, lo que es lo mismo 150 x 4. Pero he de deciros que tuvimos mucha suerte porque España fue ganadora de la
Eurocopa ese año, y por ello a todos los Españoles nos hacían nada más y nada menos que el 50% de descuento, presentando el pasaporte al comprar las entradas. Los españoles en la oficina de turismo donde las compramos, éramos los más envidiados, nos miraban como diciendo... Nunca había estado tan agradecida a unos jugadores de fútbol!!
Os cuento, las entradas se pueden sacar desde casa por internet, pero no os lo aconsejo, primero porque no sabes como te va a cuadrar el día que vas a ir, porque por mucho que planifiques, cuando estás allí puedes cambiar de planes por diversas circunstancias, y en segundo lugar y más importante es porque es fundamental que el día que vayáis esté completamente despejado, ya que las vistas son fundamentales, tanto es así que cuando está despejado se llegan a ver hasta los Alpes austriacos.

Nosotros creo recordar que al tener que enseñar los pasaportes, por el tema del descuento a los españoles, teníamos que sacarlo forzosamente allí. Recordáis que os dije en otro blog que los viajes los planifico en función de varias cosas... en este caso, ya sabéis una de ellas... tenía dudas de dónde ir y me sacó de dudas la selección española!!





Otra cosa para advertiros en vuestro viaje, es que aunque sea un mes caluroso como en mi caso, Agosto, allí es un tiempo muy fresquito, vamos el lugar ideal para estar, únicamente advertiros que para subir al Jungfrau tenéis que llevar ropa como para ir a esquiar, a esa altura hace mucho frío.
Mereció la pena subir al "Top of Europe" , allí hay un conjunto de pasillos y largas galerías donde puedes encontrar distintos restaurantes, un museo de esculturas realizadas en hielo, exposiciones fotográficas y unos grandes ventanales para poder observar todo. Luego en el exterior tienes el paraíso, nosotros lo pasamos muy bien, además de las vistas tienes muchas actividades para hacer, como esquiar, ir en tirolina, snowboard, trineos circulares, etc desde luego mis hijas se lo pasaron en grande, no se querían ir de allí.
Mereció mucho la pena subir allí, las vistas eran espectaculares.
He de decir que hubo gente que tuvo que bajarse inmediatamente por el "mal de altura". ´







Lunger, un pueblecito con unas vistas preciosas

Como ya hemos dado un repaso a las ciudades que queríamos ver, nos toca naturaleza y eso en Suiza está hecho, mires para donde mires hay paisajes espectaculares por todos lados, toca calzarse las deportivas y  hacer rutas. 
Si no traéis las rutas seleccionadas desde casa por internet, podéis ir a la oficina de turismo más cercana y allí os darán rutas con unos paisajes impresionantes.
Podéis visitar pueblos impregnados de naturaleza, a orillas del lago de Thun se encuentran las ciudades de Thun, Interlaken y Spiez.
Otro día podéis ir a Lauterbrunnen, para ver las cataratas de Trummelbachfálle, muy bonitas, el agua sale de las rocas buscando salida. Cerca de allí hay un lugar donde sale el telesférico para subir al restaurante Schilthorn, que fue donde se rodó la película de James Bond.
Meiringen, es otro pueblo muy conocido por las cataratas que emanan de las rocas y es donde se rodó la película de Sherlok Holmes.

Si no queréis llevar bocatas para las rutas no os preocupéis, encontraréis restaurantes en plena naturaleza. Uno muy recomendable y con estupendas vistas es el Restaurante Marmorbruch, en Grindelwald, con vistas estupendas hacia el Glaciar Alech, Patrimonio de la Humanidad.
Hay mucho que ver, y como nuestro viaje continuaba hacia Italia, de camino visitamos Locarno, es una ciudad donde se celebra anualmente el festival  Internacional de cine, está situado al lado del lago Mayor. Tiene una plaza muy bonita, allí se celebra el festival, llegamos a tiempo, estaba toda la plaza llena de butacas preparadas para el espectáculo.
Otra ciudad camino de Italia es Lugano, de hecho tiene carácter italiano, se encuentra a unos setenta y tantos km de Milán.

¡Y colorín colorado, el viaje a Suiza ha terminado!!












viernes, 10 de marzo de 2017

GALLETAS DECORADAS

     La primera vez que hicimos galletas decoradas, digo hicimos porque no las hice sola, las hice con mis hijas unas navidades, yo hacía el trabajo menos gratificante, el de preparar la masa, dejar reposar, amasar y ponerlas en el molde para acto seguido meterlas al horno. Mis hijas el trabajo más laborioso, ellas las decoraron.

He hecho varias recetas, casi todas son iguales, unas con esencia de vainilla, otras sin ella, varían muy poco de unas a otras, os pongo la receta de una de las últimas que hice. Todas están muy buenas.

Ingredientes:

- Harina (500 gr)
- Mantequilla (250 gr)
- Azúcar (200 gr)
- Un huevo
- Aroma a elegir (vainilla)

Preparación:

     En primer lugar dejamos la mantequilla a temperatura ambiente un buen rato para que se pueda trabajar bien, y la ponemos en un bol, añadimos el azúcar y el huevo ya batido y removemos muy bien, hasta que quede una masa homogénea, a esto le echamos la esencia de vainilla.

Luego vamos poco a poco añadiendo la harina y removiendo todo muy bien. Se puede amasar con varillas o a mano, yo siempre lo hago a mano y con rodillo.
Lo podemos meter durante media hora en la nevera para que sea más consistente, también os digo que yo hay veces que las hago y van directamente al horno. Y también hay gente que lo deja todo un día en el frigorífico.

Una vez sacado del frigorífico, lo moldeamos un poco con las manos y con el rodillo lo extendemos para comenzar a cortarlo con los moldes, mientras encendemos el horno para que se vaya calentando, lo ponemos a 180º C.

Cuando tengamos todas las galletas con las formas elegidas, las metemos al horno, tienen que estar en total 20 minutos, pero a los diez lo podemos dar la vuelta, para que queden bien hechas por ambos lados.



Más o menos quedan así, un poquito más doradas por los bordes, las probáis y para la próxima vez ya veréis si le echáis más azúcar o menos, más o menos esencia de vainilla, eso luego va en gustos.

Ahora comenzaremos a decorarlas con fondant, lo hay blanco y de colores, pero si queréis lo podéis comprar blanco y luego tintarlo con unas gotas de colorante y así conseguiréis todos los colores que queráis.



Estas galletas fueron las primeras que hicimos después de navidades, como nos gusta mucho la cocina, cuando tenemos tiempo... pues a experimentar y nos pusimos a ello!
yo iba haciendo galletitas y mis hijas iban haciendo los vestiditos.
Luego con un rotulador que venden en tiendas de repostería, se pintan las caritas de las galletas.














Y ya para que quedaran de profesional, usar bolsitas de papel celofán y un lazo de color, y ya tienes para regalar en los cumpleaños infantiles, o si vas de visita a una casa con niños, pues ya está el cumplido, o si vienen pequeños a casa, ya tienes que ofrecerles.







    Esta es una cesta que decoré para la boda de mi sobrino, ahí iban las galletitas que se repartirían para los niños.





     Estas galletitas las hice par la comunión de Cayetana, la hija de mi amiga Ana, las repartió ella en su comunión a los niños invitados.







viernes, 3 de marzo de 2017

BAÚL ANTIGUO

     Voy a enseñaros como quedó un baúl familiar que rescaté de un trastero y que llevaba ahí más de cincuenta años.
Estaba totalmente deteriorado, le faltaba madera y algunos trozos de metal, pues me puse manos a la obra..."operación rescate".
Primero comencé a restaurarle por dentro, estaba forrado de papel, pero el papel estaba muy deteriorado, lo retiré humedeciendo el papel con un trapo mojado en agua caliente, no demasiado mojado para no deteriorar la madera. Para hacerlo me ayudé de una espátula y así fui quitando todos los restos. Una vez limpio de papel, comencé con el exterior.



Primero se le hace una buena limpieza con alcohol de limpiar, que no es el mismo que se usa para curar las heridas. Una vez limpio se comienza por limpiar el metal con lana de acero, y se quita todo el óxido.
Luego nos ponemos con la madera, primero reponiendo los trozos que falten y luego lijando y limpiando la madera que tenemos para que quede toda por igual.
En este baúl concretamente, en la parte de abajo hubo que añadir una chapa metálica, porque como podéis ver en el foto, estaba rota. Lo recorté y lo sustituí con una lata de Coca-Cola recortada (se cortan los círculos de arriba y abajo y nos quedamos con el cilindro, que recortaremos por un lateral y extenderemos para que nos quede un rectángulo, luego clavaremos en la parte a rematar. 







Una vez terminado los remates, procedemos a pintar el metal, en este caso con pintura de forja, que imita perfectamente la forja, que tiene una especie de "granillo".
Ahora nos ponemos a barnizar la madera con el barniz apropiado y el tono que más nos guste.
Por último comenzamos a forrarle por dentro, podéis hacerlo en tela o en papel. Yo elegí un papel de pared estilo inglés y quedó muy bien.
Lleva mucho trabajo, pero merece la pena.




Os enseño otros baúles que he ido restaurando:



Este modelo es muy original, tiene un cajón debajo.
Desde la época de los Egipcios que utilizaban los baúles para guardar sus más preciados tesoros, han pasado a tener distintas utilidades, así como en la época medieval lo utilizaban principalmente para guardar y transportar objetos, además lo utilizaban como mesa auxiliar e incluso como asiento. Solían ser artesanales y eran encargados por personas adineradas y miembros de la nobleza.
A partir del siglo XVI lo utilizaban las mozas, para guardar su ajuar, que luego se llevaban a sus casas el día que se casaban. Luego algunas lo acababan convirtiendo en cómodas para sus habitaciones.
Más tarde con la Revolución Industrial y los nuevos transportes, como los primeros barcos y trenes, los pasajeros adinerados que viajaban en estos medios, usaban los baúles para llevar sus prendas de vestir y sus objetos más personales.
Actualmente son las personas a las que les gustan las antigüedades o los coleccionistas los que le dan el valor  que merece a los baúles.





Este es el papel que utilicé en alguno de los baúles que restauré.

Se pueden empapelar con papel (el que se utiliza para empapelar paredes) y lo podéis pegar con cola blanca o bien con tela, que aunque parezca más difícil, no lo es.
Para empapelar con tela es aconsejable utilizar planchas de espuma, que lo podéis encontrar en tapicerías, del grosor que mejor os encaje, se pone con grapas. Una vez puesta la espuma sobre la madera, se cubre con la tela. La tela tiene que estar muy tirante, se pone también con grapas.
Las grapas se tapan con unos cordones o cintas decorativas que podéis encontrar en las mercerías.











Baúl clásico